Toda empresa busca conseguir resultados. Aumentar la productividad y el rendimiento es esencial , y esto, siempre, siempre, debería empezar por los colaboradores. Si los empleados están comprometidos y felices, estos factores se incrementarán y se verán afectados los resultados globales del negocio. Quien conoce el certificado efr sabe que la certificación consigue exactamente esto.
No lo decimos nosotros, hablan los resultados. El último Barómetro de la Conciliación realizado por Fundación Másfamilia en colaboración con CEPSA, demuestra que aquellas empresas que tienen el certificado efr y abogan por medidas de conciliación, son compañías con mayores ratios de compromiso y, a su vez, cuentan con mayor nivel de talento y colaboradores felices.
¿Cómo consigue esto el modelo efr?
La certificación efr es un modelo internacional de dirección de personas. Se ocupa de avanzar y dar respuestas en materia de responsabilidad y respeto a la conciliación de la vida personal, familiar y laboral.
El modelo efr ha sido concebido sobre la base de premisas y principios tales como la profesionalidad, la visión estratégica de largo plazo, la transparencia y credibilidad, la flexiblilidad y evolución, la voluntariedad y una metodología de trabajo que atiende a la denominada PDCA (Plan, Do, Check, Act) basada en el Círculo Deming de la mejora continua.
¿Qué consiguen las empresas certificadas?
- Mejora reputación corporativa.
- Mejora de los resultados.
- Consecución de los objetivos perseguidos.
- Un mejor clima laboral y mayores cuotas de compromiso.
- Retener y captar al talento.
¿Qué debo tener en cuenta para obtener el certificado?
Lo primero de todo es identificar a qué modelo de certificación se tiene que acoger tu organización. El certificado efr se adapta a la realidad de los diferentes tamaños y sectores de las organizaciones:
- Grandes empresas: más de 250 colaboradores
- PYMES: cuentan con una plantilla de entre 31 y 250 colaboradores.
- Microempresas: menos de 30 colaboradores
- Instituciones educativas: colegios, universidades…
Lo segundo es contar con el compromiso de la Dirección. Esto es indispensable, pues el modelo efr debe ser integrado en la cultura de la organización a todos los niveles. Su implantación requiere, de partida, una apuesta decidida por parte de la dirección, manifestada en un compromiso, para el posterior despliegue del modelo. Este compromiso inicial pone de manifiesto un estilo de dirección respetuoso y facilitador con la conciliación de la vida laboral, personal y familiar poniendo el foco en la persona, su diversidad y sus entornos esenciales.
Por último el siguiente paso será contactar con el equipo de Fundación Másfamilia a través de esta misma página web, a través del correo fundacion@soyefr.org o a través de las redes sociales. Posteriormente, nos reuniremos contigo para explicarte todo detalladamente y facilitarte los documentos normativos que componen la arquitectura normativa efr.