El Círculo de Empresarios advierte: “si no se produce un giro demográfico, este flujo de salida y entrada del mercado de trabajo pone en riesgo el crecimiento económico”, en alusión a los 800.000 trabajadores que se jubilan cada año frente a 400.000 nacimientos. Además, alerta de que esta situación afecta al sistema de pensiones y a la sostenibilidad del Estado de Bienestar.
La organización reclama al próximo Gobierno y a los agentes sociales la toma de medidas que favorezcan la conciliación de la vida laboral y familiar con el objetivo de aumentar la natalidad, centrándose en tres ideas:
1.- La mejora de las infraestructuras y servicios para el cuidado de niños de 0 a 3 niños.
2.- La adopción de calendario y horarios escolares a los laborales, tomando como modelos los de Alemania y Reino Unido.
3.- La creación de un nuevo esquema de “permisos parentales compartidos”, fomento del teletrabajo y la flexibilidad horaria.
Los puntos han sido difundidos a raíz de la presentación de su estudio “Consolidar la incorporación de la mujer al trabajo y aumentar la natalidad” a cargo de Íñigo Sagardoy y Josep Santacreu. Desde el Círculo de Empresarios se muestran partidarios al cambio de huso horario y “eliminar la jornada partida en las empresas”, aunque no están de acuerdo con la propuesta electoral del PP de finalizar la jornada de trabajo a las 18 horas por ley al no adecuarse a las necesidades del mercado.
Además, proponen rediseñar los permisos de paternidad y maternidad, equiparándolos (actualmente establecidos por sexo en dos semanas frente a dieciséis) y estableciéndolos como intransferibles. Aunque no precisan cómo debería articularse, sí que apuestan por los modelos de países nórdicos, con 13 semanas para el padre y otras 13 para la madre (catorce en el caso Noruego). Sin embargo, no tienen en cuenta las posibilidades de extender los permisos en función del porcentaje de retribución que se garantice.
El nuevo Gobierno, según el organismo, deberá favorecer incentivos financieros y fiscales que promuevan la natalidad ampliando las ayudas hasta los hijos de cinco años; rediseñando y reduciendo los modelos de contratos para evitar la dualidad del mercado laboral y la precariedad así como un refuerzo de la educación a favor de la igualdad.
Sin dudas, una lanza a favor de la igualdad de oportunidades y flexibilidad laboral, pero donde la conciliación se muestra reducida a la natalidad y no contempla los casos de dependencia, desplazamientos o bienestar del trabajador. Desde la Fundación Másfamilia, con más de 500 empresas de todo el mundo certificadas efr, apostamos por un nuevo modelo productivo a favor tanto de la familia como del trabajador en todos los aspectos de su vida.